viernes, 27 de mayo de 2016

Sopa sarda de alcachofas

Puesta de sol. Tarifa en primavera.
 Mi amigo Juan C. que ha vivido mucho tiempo en Italia no deja de sorprenderme con sus recetas italianas. No son las típicas recetas que cualquiera imagina cuando piensa en Italia, no. Algunas son antiguas, otras son especiales de una región, y siempre muy interesantes. 
 Como esta sopa sarda de alcachofas,(Cerdeña) que me encantó por lo sencilla, ligera y rica. Desde que la tomé en su casa no he dejado de hacerla, y por eso aunque ya la temporada de alcachofas está tocando a su fin, no he querido dejar de compartirla para que la disfruteis. 




Ingredientes para cuatro personas

  • Seis alcachofas grandes, si son pequeñas ocho
  • Dos cebollas, yo las prefiero nuevas
  • Dos patatas medianas
  • Un buen manojo de hierbabuena
  • Aceite de oliva, pimienta negra molida, sal
  • Unos dados de pan frito ó tostado para acompañar



Modo de hacerlo

Cortar la cebolla en brunoise (daditos pequeños). Ponerla al fuego con dos cucharadas de aceite de oliva a fuego lento. Mientras, lavar muy bien la hierbabuena, separar las hojas de los tallos y desechar los últimos. Cortar las hojas finitas y añadirlas a la cacerola. En este momento el olor de la cocina será maravilloso. No os preocupeis por la cantidad de hierbabuena, luego la sopa no sabe tanto aunque lleve mucha. 


  
Mientras se rehoga lo anterior, limpiar muy bien las alcachofas dejando solo el corazón. Cortar los corazones en láminas muy finas, tanto que se puedan sacar entre quince y veinte láminas de cada uno ,e irlas añadiendo a la cacerola sobre la marcha para que no se oxiden. Añadir agua que las cubra unos 3 cm. por encima, salpimentar y dejar cocinar a fuego lento. 
 Pelar las patatas y cortarlas en láminas finas igual que las alcachofas. Añadirlas a la cacerola. Probar y rectificar de sal ó pimienta si hiciera falta. 
 Cocer hasta que la patata esté tierna, añadiendo más agua si evapora mucha ó la queremos mas líquida.
 Servir acompañada de los daditos de pan.